Reflexión, a partir del artículo Interview for Integrity, de Entrepreneur, acerca del adorno de los currículos, por parte de los candidatos, con datos que, en algunos casos, caminan por el mundo de la falsificación, la desinformación o el oscurantismo. El interesado no parece caer en la cuenta que para los trabajos decentes, además de leer entre líneas en entrevistas concienzudas, se suele verificar los datos que se suministran y, cada vez más, utilizar Internet, a través de motores de búsqueda.
Sugiero sinceridad y transparencia, decir la verdad y no tapar o esconder. Por supuesto, ser discreto, pero no engañar. Si no eres la persona idónea para el puesto que te presentas, y no te seleccionan, créeme que es lo mejor que te puede pasar. Si percibes malas artes en el proceso de selección o vibraciones negativas, evidentemente no te interesa el puesto. Sé que es fácil decirlo y puede que difícil practicarlo, sobre todo cuando necesitas trabajar porque la economía te ahoga, pero con maniobras orquestales en la oscuridad no se va por el camino que te mereces transitar en esta Vida.
Sugiero sinceridad y transparencia, decir la verdad y no tapar o esconder. Por supuesto, ser discreto, pero no engañar. Si no eres la persona idónea para el puesto que te presentas, y no te seleccionan, créeme que es lo mejor que te puede pasar. Si percibes malas artes en el proceso de selección o vibraciones negativas, evidentemente no te interesa el puesto. Sé que es fácil decirlo y puede que difícil practicarlo, sobre todo cuando necesitas trabajar porque la economía te ahoga, pero con maniobras orquestales en la oscuridad no se va por el camino que te mereces transitar en esta Vida.